¿Están relacionados todos los eventos naturales recientes?
Ya sabemos todos las recientes noticias que venimos recibiendo de diferentes rincones del planeta respecto a eventos naturales que, dadas sus magnitudes, han generado estragos y preocupación. Debemos entonces preguntarnos diferentes aspectos como ¿Están todos estos eventos relacionados? ¿Tenemos los humanos que ver con estos fenómenos?
En 2017, por tercer año consecutivo, han ocurrido huracanes en el Continente Americano que deberían presentarse cada 500 años, tiempo denominado período de retorno, correspondiendo estos a los de mayor magnitud o categoría categoría 5 según la escala Saffir-Simpson, los cuales pueden registran vientos sostenidos de más de 250 kilómetros por hora. La probabilidad de que estos eventos se hallan presentado de manera consecutiva durante tres años, es realmente muy baja.
En otro extremo del planeta, en lugares como India, Bangladesh y Nepal las inundaciones son comunes en la temporada de Monzón, la cual se presenta entre julio y octubre todos los años. Sin embargo, las lluvias de este año no han sido las habituales; la cantidad de agua ha generado grandes estragos y corresponde a la más alta que se ha presentado en las últimas décadas.
Por otro lado, en un período de menos de dos semanas se presentaron en México dos sismos de alta magnitud, generando el último de ellos, el colapso de múltiples edificaciones.
La explicación para estos dos sismos es aparentemente la subducción (hundimiento) de la placa tectónica de Cocos bajo la de Norteamérica. Sin embargo, el hecho de que eventos como los mencionados huracanes y movimientos telúricos sucedan de manera continua, nos recuerda un artículo publicado en la Revista Nature, llamado Slow earthquakes triggered by typhoons, donde se argumenta que existe una correlación entre los movimientos telúricos y los huracanes.
Si bien los huracanes son eventos atmosféricos y los terremotos son eventos geológicos, podría existir una razón por la cual estos dos fenómenos pudieran estar ligados. Específicamente, el artículo sugiere que los huracanes generan cambios súbitos (caída) en la presión atmosférica. Debido a esto, tanto el agua como el aire que se encuentra de manera subterránea tienden a subir, al generarse una menor fuerza que lo retiene. Este fenómeno genera que se reduzca la fricción que existe entre las fallas y que las mantiene estables y, por ende, puede causar deslizamientos entre las mismas generando los temblores o terremotos.
La naturaleza es una gran red donde un cambio en una variable desencadena un efecto en alguna otra de las innumerables que tiene. Si bien no sabemos a ciencia cierta la causa que está generando todos estos fenómenos consecutivos a nivel mundial, hoy más que nunca debemos ser responsables en cuanto a la forma en la que estamos desarrollando nuestras actividades y cómo estas pueden tener un efecto directo en el planeta.
Les compartimos un video de Conservación Internacional
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